Me dejó muy tocada la segunda parte de la bilogía Horizonte Martina, de Elísabet de Benavent. Después de Martina con vistas al mar, esperaba más de lo mismo y me encontré con algo que no esperaba, con una novela más madura y que toca unos temas que me han interesado muchísimo. Así lo plasmé en la reseña que publiqué en Anika entre Libros y que ahora traigo al blog.
Título: Martina en tierra firme (Horizonte Martina 2)
Título Original: (Martina en tierra firme, 2016)
Autor: Elísabet Benavent
Editorial: Suma de Letras Colección: Fuera de Colección
Copyright:
© Elísabet Benavent Ferri, 2016
© Penguin Random House Grupo Editorial, 2016
Edición: 1ª Edición: Febrero 2016
ISBN: 9788483658499
Tapa: Blanda
Etiquetas: bebés, amor, erótica, feminismo, gastronomía, psicología, literatura española, novela, novela de personajes, niños, bilogías, sexo, anorexia - bulimia, paternidad, depresión, matrimonio, emociones, maternidad, crecimiento, educación emocional, cocina, baby blues, depresión postparto
Nº de páginas: 704
Título Original: (Martina en tierra firme, 2016)
Autor: Elísabet Benavent
Editorial: Suma de Letras Colección: Fuera de Colección
Copyright:
© Elísabet Benavent Ferri, 2016
© Penguin Random House Grupo Editorial, 2016
Edición: 1ª Edición: Febrero 2016
ISBN: 9788483658499
Tapa: Blanda
Etiquetas: bebés, amor, erótica, feminismo, gastronomía, psicología, literatura española, novela, novela de personajes, niños, bilogías, sexo, anorexia - bulimia, paternidad, depresión, matrimonio, emociones, maternidad, crecimiento, educación emocional, cocina, baby blues, depresión postparto
Nº de páginas: 704
Argumento:
Tras el bache con el que se cerró la primera entrega de este "Horizonte Martina", los protagonistas de la bilogía, Martina y Pablo, retoman su relación y se enfrentan a nuevo reto: ser padres. Mientras, tanto Amaia como Sandra se pondrán a prueba en su evolución hacia la vida adulta.Opinión:
Aunque, como comenté en la reseña de "Martina con vistas al mar", el final (el cliffhanger que pretende atar al lector de una entrega a otra) no fue demasiado de mi agrado, he de decir que esta novela me ha sorprendido muy gratamente. En ella he encontrado a una Elísabet Benavent mucho más madura, que profundiza muchísimo más en los temas que toca y que no se centra en lo meramente romántico o erótico (aunque sigue habiéndolo) para ofrecer una obra que convenza al lector.
Me ha impresionado mucho la profundidad, la humanidad y la verosimilitud con la que toca algunos temas importantes, como la maternidad y la depresión postparto, los trastornos alimentarios, la pésima relación que muchas veces (o en determinados momentos) tenemos las mujeres con nuestros cuerpos, los diferentes estilos de familia y su influencia en el futuro de los hijos o los ajustes que hay que hacer a medida que vamos creciendo y tenemos que ir despidiéndonos de ciertas situaciones o lugares, dando la bienvenida a otros y acomodando a quienes nos acompañaron en nuestro viaje y quienes lo harán a partir de ahora.... Es ley de vida, hay que crecer, evolucionar... y las tres amigas que protagonizan esta bilogía lo aprenderán en esta novela, aunque con éxito desigual.
En este sentido, he decir que me ha conquistado la historia de Amaia y que me ha dado mucho sobre lo que pensar la de Sandra. Sandra siente eso que nos han dicho tantas veces a las mujeres: "que se te pasa el arroz". Y actúa más movida por ese gran reloj imaginario sobre su cabeza que por motivos basados en los sentimientos o la razón. Y gracias a ella, Benavent nos hace ver qué ocurre cuando tomas decisiones fundadas en motivaciones incorrectos, qué arriesgas en esa apuesta y qué y cuánto puedes llegar a perder.
Esta conclusión final de la historia de Sandra cuadra muy bien con la ideología subyacente que encontramos en la novela: una ideología feminista que aboga por relaciones entre iguales, por respeto, por reparto equitativo de tareas y por compartir en vez de poseer. Nadie posee a nadie, dice uno de los personajes, contraviniendo el mensaje global que tantas canciones, películas y novelas románticas nos siguen lanzando.
Y por eso (entre otras cosas), esta bilogía me ha parecido actual e, incluso, muy necesaria, dados los tiempos que corren y la regresión que estamos sufriendo en aspectos relacionados con las relaciones sexuales y los roles de género. Me gustan mucho los mensajes que se lanzan en forma de diálogos o reflexiones de los personajes pero que también se ven a través de lo que viven y lo que les pasa.
De igual modo, también me ha gustado mucho cómo aborda Benavent un tema tan peliagudo como la gestión de nuestras propias emociones (con esos dos modelos tan opuestos que son Martina y Pablo y que deben ir amoldando sus posturas -e, insisto: amoldando ambos, no imponiéndose uno sobre el otro- si es que quieren conjugar el verbo futuro en plural) o la depresión postparto, un enfoque que viene a quitarle mucha utopía irreal a cómo nos venden la mayoría de veces la maternidad para añadirle una buena dosis de realidad.
El resultado de todo ello es una obra más dramática (aunque no faltan los toques de humor, ni de romanticismo, ni de erotismo a los que nos tiene acostumbrados la autora) y, como digo, más madura, más... quizá responsable en lo que respecta al compromiso entre autor y sociedad.
Para hacernos llegar esta trama, Benavent vuelve a utilizar las dos voces narrativas en primera persona contrapuestas y complementarias (la de Pablo y la de Martina) y, aunque es verdad que Martina se desdibuja en un momento dado (quiero pensar que como un reflejo de lo que estaría pasando en su vida en esos meses de bloqueo), lo cierto es que casi no se la echa de menos con un Pablo que toma las riendas de la vida, de la narración y del futuro con dudas y frustraciones pero sin titubear.
Y también mantiene la autora su estilo personal (deslenguado, directo y ágil) aunque, como digo, añade reflexiones y frases que le dan profundidad y que, sin duda, harán reflexionar al lector sobre tantas cuestiones vitales.
En definitiva, una obra amena y profunda que aborda temas francamente interesantes con humanidad y verosimilitud y ofreciendo algunos puntos de vista distintos a los que suelen ser habituales.
Nos seguimos leyendo.
A mi en cambio esta segunda parte de la bilogía no me convenció demasiado. Se me hizo pesada.
ResponderEliminarUn beso ;)
Cuando estuvimos comentando la bilogía, ya te dije que lo que pensaba se asemeja mucho a lo que dices en la reseña. Para mí esta bilogía, y sobre todo la segunda parte, aparca a un lado sentimientos amorosos y se centra en otras cuestiones mucho más profundas, a mi parecer.
ResponderEliminarMe alegro que te haya gustado más que la primera ^^
Un beso!
No lo conocía y creo que valdrá la pena
ResponderEliminarpues lo tendré en cuenta a ver
un beesito
Coincido absolutamente contigo Lidia, esta parte rompe totalmente con la anterior y nos muestra una historia más real, más madura y profunda...por eso es por lo que me gusta tanto su autora, rompe con los tópicos y transmite al lector de una forma arrolladora.
ResponderEliminarBesitos
A pesar de que era reacia a leer un libro de Elisabet Benavent, aunque en realidad no sé por qué, parece por lo que dices que toca muchos temas y puede resultar interesante. Creo que no me voy a negar si uno se me cruza.
ResponderEliminar¡Besos!
No son libros que me llamen así que esta vez no me dejo tentar.
ResponderEliminarBesotes!!!