Ficha técnica:
Título: El puente de los asesinos (Las aventuras del Capitán Alatriste 7) Autor: Arturo Pérez-Reverte Editorial: Alfaguara Género: novela, novela histórica, novela de aventuras Páginas: 384
Publicación: 27/10/2011 ISBN: 9788420407098
Sinopsis (página del autor):
«Diego Alatriste bajó del carruaje y miró en torno, desconfiado. Tenía por sana costumbre, antes de entrar en un sitio incierto, establecer por dónde iba a irse, o intentarlo, si las cosas terminaban complicándose. El billete que le ordenaba acompañar al hombre de negro estaba firmado por el sargento mayor del tercio de Nápoles, y no admitía discusión alguna; pero nada más se aclaraba en él.» Nápoles, Roma y Milán son algunos escenarios de esta nueva aventura del capitán Alatriste. Acompañado del joven Íñigo Balboa, a Alatriste le ordenan intervenir en una conjura crucial para la corona española: un golpe de mano en Venecia para asesinar al dogo durante la misa de Navidad, e imponer por la fuerza un gobierno favorable a la corte del rey católico en ese estado de Italia. Para Alatriste y sus camaradas -el veterano Sebastián Copons y el peligroso moro Gurriato, entre otros-, la misión se presenta difícil, arriesgada y llena de sorpresas. Suicida, tal vez; pero no imposible.
Alatriste ha sido una de las constantes de este año, gracias al reto de Carmen y amig@s. Yo he recorrido con él, en uno solo, un proceso que a Arturo Pérez-Reverte le ha llevado años. Quizá por eso he visto mejor su evolución, el progresivo aislamiento del que nos habla Íñigo en esta última entrega (hasta el momento) de la saga, su personalidad cada vez más huraña, o más decepcionada, o más resignada. Después de este 2013, Alatriste ya es como un amigo para mí y verle abatido en lo personal (que no en lo guerrero) me entristece, quizá porque no entiendo la razón (abro paréntesis para comparar este comentario que estoy haciendo con el que en su momento hice sobre Bevilacqua, otro de mis grandes amigos literarios de este año. Mientras escribía eso que acabo de escribir pensaba: "esto ya lo he pensado yo con otro personaje" y no he podido dejar de hacértelo notar, no sé si para mostrarte la conexión entre ambos personajes o para mi propia reflexión sobre lo que determinados personajes y determinadas lecturas provocan en mí).
Pérez-Reverte nos hace viajar, en esta ocasión, a una Venecia convertida en ratonera para cumplir una misión que, por momentos, se presente como imposible, más parecida a una misión suicida o una trampa con pocas posibilidades de encontrar salida que a una auténtica campaña militar. El autor se demora en describir los detalles previos a una acción que se precipita en los capítulos finales, como suele ocurrir en los libros de Alatriste.
También encontramos otros elementos coincidentes con otras obras de la saga como la reflexión sobre el universo soldadesco, su valor inútil para quien hace gala de él y las medallas (o riquezas) con las que otros se visten gracias a ellos. Lo de gracias es un decir, porque precisamente lo que denuncia Pérez-Reverte en la saga es el utilitarismo hacia este tipo de mercenarios, su poco valor como personas, ni siquiera como herramientas de guerra: solo son el perro de combate que se bate el cobre por una idea, una nación, un rey, una religión o lo que sea pero al que su hoja de servicios de poco servirá cuando lo necesite. Mientras otros consiguen dinero y gloria gracias a ellos, ellos acaban olvidados, mendigando y con secuelas físicas y mentales de por vida.
Me ha gustado esta séptima entrega de Las Aventuras del Capitán Alatriste sobre todo por el protagonismo que cobra el gran antagonista de la serie: Gualterio Malatesta (por cierto, no sé si lo he dicho ya, pero me tiene encandilada la elección o la creación de nombres propios de Pérez-Reverte en esta saga. ¡Qué nombre! Gualterio Malatesta. Me parece tan visual, tan premonitorio... que solo con leerlo ya te imaginas su rostro picado y, por supuesto, que es el malo de la historia). En esta novela le conocemos un poco más en profundidad, sabemos algo más sobre sus razones y el precio de su alma. Pero, sobre todo, me ha gustado la interacción con el capitán, esos diálogos cargados de tensión, de animadversión y de puyas... pero también de comprensión mutua: al final ambos son la misma cara de la misma moneda, convertidos en cara y cruz por puro azar. Conocer al héroe y al antihéroe y descubrir sus puntos en común y lo que los hace diferentes me ha parecido muy enriquecedor para la trama y para la configuración de Alatriste como personaje.
Con esta reseña doy por concluido el Reto Capitán Alatriste y lo hago con pena. No sé cuándo volveré a reencontrarme con él pero para mí este año que hemos pasado juntos ha sido muy especial. Así que no me queda más que agradecer a Carmen el que nos metiera en estos líos y a otros participantes en el reto (sobre todo a Pedro, de El búho entre libros, y a Porlomenix, de Bourbon Street, además, por supuesto, de la propia Carmen) el diálogo que hemos ido estableciendo con nuestras reseñas y comentarios a lo largo del año. Una experiencia positiva más que sumar a los méritos puramente literarios y reflexivos de la saga.
Pérez-Reverte nos hace viajar, en esta ocasión, a una Venecia convertida en ratonera para cumplir una misión que, por momentos, se presente como imposible, más parecida a una misión suicida o una trampa con pocas posibilidades de encontrar salida que a una auténtica campaña militar. El autor se demora en describir los detalles previos a una acción que se precipita en los capítulos finales, como suele ocurrir en los libros de Alatriste.
También encontramos otros elementos coincidentes con otras obras de la saga como la reflexión sobre el universo soldadesco, su valor inútil para quien hace gala de él y las medallas (o riquezas) con las que otros se visten gracias a ellos. Lo de gracias es un decir, porque precisamente lo que denuncia Pérez-Reverte en la saga es el utilitarismo hacia este tipo de mercenarios, su poco valor como personas, ni siquiera como herramientas de guerra: solo son el perro de combate que se bate el cobre por una idea, una nación, un rey, una religión o lo que sea pero al que su hoja de servicios de poco servirá cuando lo necesite. Mientras otros consiguen dinero y gloria gracias a ellos, ellos acaban olvidados, mendigando y con secuelas físicas y mentales de por vida.
Me ha gustado esta séptima entrega de Las Aventuras del Capitán Alatriste sobre todo por el protagonismo que cobra el gran antagonista de la serie: Gualterio Malatesta (por cierto, no sé si lo he dicho ya, pero me tiene encandilada la elección o la creación de nombres propios de Pérez-Reverte en esta saga. ¡Qué nombre! Gualterio Malatesta. Me parece tan visual, tan premonitorio... que solo con leerlo ya te imaginas su rostro picado y, por supuesto, que es el malo de la historia). En esta novela le conocemos un poco más en profundidad, sabemos algo más sobre sus razones y el precio de su alma. Pero, sobre todo, me ha gustado la interacción con el capitán, esos diálogos cargados de tensión, de animadversión y de puyas... pero también de comprensión mutua: al final ambos son la misma cara de la misma moneda, convertidos en cara y cruz por puro azar. Conocer al héroe y al antihéroe y descubrir sus puntos en común y lo que los hace diferentes me ha parecido muy enriquecedor para la trama y para la configuración de Alatriste como personaje.
Con esta reseña doy por concluido el Reto Capitán Alatriste y lo hago con pena. No sé cuándo volveré a reencontrarme con él pero para mí este año que hemos pasado juntos ha sido muy especial. Así que no me queda más que agradecer a Carmen el que nos metiera en estos líos y a otros participantes en el reto (sobre todo a Pedro, de El búho entre libros, y a Porlomenix, de Bourbon Street, además, por supuesto, de la propia Carmen) el diálogo que hemos ido estableciendo con nuestras reseñas y comentarios a lo largo del año. Una experiencia positiva más que sumar a los méritos puramente literarios y reflexivos de la saga.
Nos seguimos leyendo.
Incluyo este libro en los siguientes retos:
- Reto Capitán Alatriste 7/7
Otros títulos de la saga reseñados en el blog:
- El capitán Alatriste (Las aventuras del Capitán Alatriste 1)
- Limpieza de sangre (Las aventuras del Capitán Alatriste 2)
- El sol de Breda (Las aventuras del Capitán Alatriste 3)
- El oro del rey (Las aventuras del Capitán Alatriste 4)
- El caballero del jubón amarillo (Las aventuras del Capitán Alatriste 5)
- Corsarios de levante (Las aventuras del Capitán Alatriste 6)
A Alatriste lo tengo en el punto de mira. Creo que mi abuelo tiene al menos los primeros libros, así que espero encontrarle hueco pronto :)
ResponderEliminarSolo nos queda esperar a la próxima entrega, que creo no tardará mucho. Yo también he disfrutado con este reto
ResponderEliminarLo tengo pendiente, este año no me apunté al reto porque tengo un montón de sagas comenzadas (mi reto personal de este 2014 es ir terminando sagas de las que tengo empezadas) antes de iniciar otras, si no esto es un no acabar.
ResponderEliminarEste es de los que menos me ha gustado de toda la saga aunque es bastante bueno
ResponderEliminarAunque no ha sido el mejor episodio de la saga, sí que me ha dejado buen sabor el tema de Malatesta; creo que todos los participantes hemos disfrutado por igual,
ResponderEliminarbesucus