Fue una de mis lecturas favoritas del año pasado y todavía no la había traído hasta el blog, así que aprovecho esta semana del amor para declararme a Una madre y a su autor, Alejandro Palomas, recuperando la reseña que realicé para Anika entre Libros.
Título: Una madre
Título Original: (Una madre, 2014)
Autor: Alejandro Palomas
Editorial: Siruela
Colección: Nuevos Tiempos
Copyright:
© Alejandro Palomas, 2014
© Editorial Siruela, 2014
Edición: 1ª Edición: Febrero 2014
ISBN: 9788416120437
Tapa: Blanda
Etiquetas: familia, contemporánea, drama, novela dramática, literatura española, navidad, novela, novela de personajes, novela dramática, novela sentimental, padres e hijos, homosexualidad, maternidad
Nº de páginas: 248
Título Original: (Una madre, 2014)
Autor: Alejandro Palomas
Editorial: Siruela
Colección: Nuevos Tiempos
Copyright:
© Alejandro Palomas, 2014
© Editorial Siruela, 2014
Edición: 1ª Edición: Febrero 2014
ISBN: 9788416120437
Tapa: Blanda
Etiquetas: familia, contemporánea, drama, novela dramática, literatura española, navidad, novela, novela de personajes, novela dramática, novela sentimental, padres e hijos, homosexualidad, maternidad
Nº de páginas: 248
Argumento:
La primera cena de Nochevieja en que la familia de Amalia podrá reunirse al completo desde hace tiempo le servirá a su hijo Fer para hacer memoria de las vivencias experimentadas hasta el momento y de las heridas que la vida ha causado en la piel de cada uno de ellos a lo largo de los años. El desamor, el abandono, el egoísmo, la soledad, la muerte, el anhelo de algo que no se puede conseguir o las máscaras que a veces nos ponemos para distanciarnos hasta de nosotros mismos son las algunas de las causas de esas heridas, heridas que solo el tiempo es capaz de curar (si es que tienen cura) y que siempre sanan mejor si uno tiene a alguien que se ocupa de ellas.Opinión:
Alejandro Palomas vuelve a sorprendernos en Una madre con su profunda humanidad y por la exploración del ser humano y sus cicatrices tan exhaustiva, certera y esperanzadora que realiza. Y digo vuelve a sorprendernos porque aunque una ya espera sensibilidad y humanidad a raudales del autor, ha vuelto a dejarme con la boca abierta al comprobar hasta dónde esa capaz de llegar, hasta qué punto es capaz de explorar el alma humana, su maestría para construir personajes llenos de contradicciones y sentimientos, con personalidades bien marcadas y tremendamente reales. Tan reales que parecen hechos de carne y hueso en vez de papel y palabras. Tan reales que una espera encontrárselos alguna vez en la vida. Tan reales que he estado tentada de preguntarle a Palomas qué tal le ha ido a Fer, a Amalia, a Silvia, a Emma y al tío Eduardo después de Año Nuevo.
Palomas tiene el don de hablar de temas aparentemente sencillos (una cena de Nochevieja y sus preparativos o los nudos que tantas veces se enredan en los lazos familiares) para profundizar en las causas del dolor, sus consecuencias y los remedios necesarios para aliviarlo. Y lo hace a través de personajes entrañables que cargan con sus propias mochilas llenas de piedras, arrastrando su peso de página a página del calendario. Heridas mal curadas, heridas que se reabren, heridas recientes o heridas que nunca se cerrarán y con las que hay que aprender a convivir, como la soledad, la sensación de no encajar en el mundo, el tiempo detenido tras un suceso trágico que le da la vuelta a nuestras vidas como si fueran un calcetín sucio que jamás podrá volver a estar limpio.
Todas esas heridas tienen cabida en una novela en la que el drama está permanentemente presente pero cuyos personajes, como ocurre en la vida misma, sobreviven a base de humor y de cariño. En este sentido, es imposible no hacer una mención especial a Amalia, la madre de Fer, la madre de esta familia, la madre del título (una madre cualquiera, pero ¡menuda madre!). Confieso que a mí me conquistó desde la primera página aunque entiendo que la mezcla de inocencia que roza la estupidez, humor e ironía que nos propone Palomas en ella pueda llegar a chocar a más de uno. Amalia es única, con sus locuras, sus achaques, sus manías, su dependencia para tantas cosas y su despreocupación para otras, su pasado, su capacidad para ver en los demás lo que nadie ve o, al contrario, para no ver lo que todos ven; su fragilidad, su fortaleza, su manera de entender el mundo y su forma de vivir cada día como si las lecciones de la vida no contaran y las malas intenciones de la gente fueran un cuento para asustar a niños confiados. Amalia es puro cariño, pura emoción, puro sentimiento. Un personaje que se convierte en eje central de la historia y que añade el humor (a veces absurdo, con un toque muy almodovariano) a una novela llena de cuchilladas.
Con su estilo poético, trabajado y cercano, su punto de vista siempre humano y la profundidad de algunas frases que se quedan en el lector para siempre, Alejandro Palomas vuelve a conquistarnos con una novela llena de sentimientos en la que es imposible no involucrarse y que despertará en quien la lea la reflexión sobre el valor de la familia, la importancia del cariño, del perdón y de la comprensión y la alegría por celebrar la proximidad de quienes se mantienen a nuestro lado. A pesar de los años. A pesar de las heridas. A pesar de los errores.
Nos seguimos leyendo.
Tengo tantas ganas de leerme éste, con tantas cosas buenas que decís sobre él...
ResponderEliminar¡Besos!
Publiqué la reseña hace poco. Me gustó muchísimo, es una novela muy especial.
ResponderEliminarAmalia es mucha Amalia y Alejandro sabe crear personajes como nadie. Como ya le dije a él en su día no es fácil que obras de este tipo se encuentren entre mis lecturas, no son las que más me gustan, pero es ver su nombre en la portada de una novela y lanzarme a ella sin freno. Pronto podremos gozar de una obra suya y yo ya estoy contando los días. Besos.
ResponderEliminarLe tengo muchas ganas pero no me atrevo porque no estoy en mi mejor momento para leerla... Pero apuntada está! Besos!
ResponderEliminarEstupenda reseña. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Besos
ResponderEliminarCuantas más reseñas leo de esta esta novela, más ganas tengo de leerla. Espero que finalmente también me conquisten sus personajes.
ResponderEliminarUn besi
La tengo pendiente en el kindle...me da la impresión de que me va a gustar mucho
ResponderEliminarSaludos
La tengo pendiente en el kindle. Me da la impresión de que me va a gustar mucho.
ResponderEliminarSaludos
Soy la única en el mundo mundial a quien no le gustó este libro. No creo en este padre tan desnaturalizado, la madre idiota me repatalea, el tío que se comporta como un adolescente... no,no y no.A lo mejor serán diferencias culturales y la novela es demasiado sureña para mi gusto, jaja, pero a mí me pareció de esperpento.
ResponderEliminarsaludos
No conocía el libro.. no sé, no me llama
ResponderEliminarveremos a ver si me animo
un besito
Ya la tenía fichadita y voy a tener que subirle muchos puestos tras tu fantástica reseña.
ResponderEliminarBesotes!!!
Uno de mis eternos pendientes. Todos los que han leído este libro hablan maravillas de él. Tengo que leerlo pronto. Besos
ResponderEliminarQué te voy a decir yo que tú no sepas...? Adoro a Alejandro y me cautivan sus novelas.
ResponderEliminarMe alegro de que tú también la hayas disfrutado ;)
Besos
Me gustó mucho, lo leí hace no mucho y me pareció una manera de escribir fresca y cautivadora
ResponderEliminarUn beso
Que montaña rusa de sentimientos tuve cuando leí esta novela. No me canso de recomendarla.
ResponderEliminarEspero ponerme con él pronto!
ResponderEliminarBesotes