Ficha técnica:
Título: La ovejita que vino a cenar Texto: Steve Smallman Ilustraciones: Joelle Dreidemy Editorial: Beascoa Género: Álbum ilustrado, infantil (a partir de 5 años) Páginas: 32
Publicación: 10/2007 ISBN: 9788448824549
Sinopsis:
El lobo protagonista prepara una sopa de verdura mientras sueña echarle un poco de carne estofada que le dé sustancia. Y de repente, el estofado llama a su puerta. Solo que aún está vivito y coleando y no será tan fácil convertirlo en jugoso plato como pensaba. Y es que a veces hay cosas que necesitamos más que añadir lujos a nuestra comida.
Este libro me enamoró desde la primera que lo vi. Y cuanto más lo leo y más lo cuento, más me gusta. Se le pueden sacar mil matices diferentes: es divertido, tiene su moraleja entrañable, cambia roles tradicionales, está escrito con mucho sentido del humor... y cada vez que lo cuento, sucede algo distinto.
Me encanta el humor que destila y lo entrañables que resultan sus dos personajes: un lobo y una ovejita que saben aparcar los instintos primarios que los separan para aprender a estar juntos, convivir e, incluso, convertirse en amigos. Es el poder del cariño.
A los niños les encanta ese cambio de roles, ese juego que propone el autor, esas excusas que el lobo va poniendo para no comerse a una ovejita tan tierna como estofado como como compañía.
Creo que es un cuento muy apropiado para ser contado, porque permite tanto ceñirse a las maravillosas ilustraciones del libro como añadir todos los detalles que el contador quiera. A los más pequeños les encanta sentir el hipo de la ovejita y el miedo del lobo cuando se arrepiente de sus acciones.
Y quizá también sea una buena excusa para que los niños prueben la deliciosa sopa de verduras especialidad del lobo.
En definitiva, una obra maravillosa, con una historia entrañable y divertida, que mantiene un constante ritmo y que es imposible que no te enamore.
Nos seguimos leyendo.
Me encanta el humor que destila y lo entrañables que resultan sus dos personajes: un lobo y una ovejita que saben aparcar los instintos primarios que los separan para aprender a estar juntos, convivir e, incluso, convertirse en amigos. Es el poder del cariño.
A los niños les encanta ese cambio de roles, ese juego que propone el autor, esas excusas que el lobo va poniendo para no comerse a una ovejita tan tierna como estofado como como compañía.
Creo que es un cuento muy apropiado para ser contado, porque permite tanto ceñirse a las maravillosas ilustraciones del libro como añadir todos los detalles que el contador quiera. A los más pequeños les encanta sentir el hipo de la ovejita y el miedo del lobo cuando se arrepiente de sus acciones.
Y quizá también sea una buena excusa para que los niños prueben la deliciosa sopa de verduras especialidad del lobo.
En definitiva, una obra maravillosa, con una historia entrañable y divertida, que mantiene un constante ritmo y que es imposible que no te enamore.
Nos seguimos leyendo.
En casa hay varios pequeños que seguro lo disfrutan.
ResponderEliminarUn beso, Lidia.
Que chulada!!Los libros infantiles me pierden, besotes
ResponderEliminarMe lo apunto, que me encuentro un poco perdida a la hora de comprarle cuentos a mi peque de 4 años. Quiero que sean cuentos que transmitan valores a la vez que los niños se divierten.
ResponderEliminarBesos
No sabes lo que añoro contar cuentos. Un beso.
ResponderEliminar¡Qué cosa tan bonita!
ResponderEliminarIntentaré conseguirlo, ya te diré si le gusta a Irene y Marcos. Besos
ResponderEliminarAys, que me pierden estos cuentos...
ResponderEliminarBesotes!!!
¡¡Quiero volver a mi niñez para tener estos libros!! Besos
ResponderEliminarAy pobre ovejita!! ;D no conocía este cuento...me encantan y me gusta mucho más contar cuentos a los niños....soy muy teatrera ;D
ResponderEliminarJajajaja me encanta, a ver si lo encuentro =)
ResponderEliminarBesotes