"La cocina de la bruja", de Nick Sharratt: un divertido (y asqueroso) paseo por la cotidianidad de una bruja

Título: La cocina de la bruja
Autor: Nick Sharratt
Editorial: Macmillan
Género: infantil, LIJ, álbum ilustrado
Páginas: 24
Publicación: 2011
ISBN: 9788479427221

  Un libro con solapas mágicas que puedes abrir de dos maneras: con una disfrutarás, ¡mmm...! Con la otra..., ¡asco sentirás! ¡Puaj!

  Aprovecho la semana de Halloween para hablarte de este libro que tanto juego me ha dado siempre. Se titula La cocina de la bruja y a los niños les encanta porque sus solapas son de doble entrada: por un lado muestran algo apetitoso y por el otro, algo asqueroso. ¡Tenías que ver qué caras ponen y qué aspavientos hacen! Me parto con su expresividad. Al principio están expectantes, luego sorprendidos y, en cuanto le cogen el tranquillo al libro, entran al trapo que da gusto, tengan la edad que tengan.

   Yo creo que es un libro más para jugar o para contar que para leer, puesto que el texto en sí no dice mucho. Pero si haces un poco de teatrillo, te recreas en el placer de la comida y en el asco y la repugnancia que dan otras cosas, puedes pasar un rato muy divertido.

   Las ilustraciones son grandes y coloridas y, como puedes ver en la siguiente foto, todas las páginas incluyen una pestaña que, como he dicho antes, se puede abrir de dos modos diferentes.

 

  Yo suelo contarlo en mis talleres de cocina o en las sesiones de brujas o Halloween y siempre se lo pasan genial con él. A mí se me ocurrió una historia parecida a la que cuenta Beatriz Montero en este vídeo (aunque ella lo hace mucho mejor, claro está) y es el soporte que utilizo para hilar las páginas, puesto que en el libro no hay historia como tal.

  En definitiva, un buen recurso para esta época del año y para que los niños empiecen a diferenciar sabores y sensaciones respecto a la comida, además de para profundizar en el mundo de las brujas, en este caso, desde lo que podría ser la cotidianidad de su cocina. Una lástima que esté descatalogado.

     Nos seguimos leyendo.