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viernes, 12 de junio de 2015

"Esto no es (solo) un diario", de Adam J. Kurtz: creatividad en estado puro

  Aunque es verdad que después de este he visto muchos como él, me maravilló este libro que reseñé para Anika entre Libros y que hoy rescato en el blog.

Esto no es (solo) un diario
Título: Esto no es (solo) un diario
Título Original: (1 Page AT A TIME, 2014)
Autor: Adam J. Kurtz
Editorial: Plaza & Janés
Colección: Obras diversas


Copyright:
© Adam J, Kurtz, 2014
© Penguin Random House Grupo Editorial, S.A.U, 2014
Traducción: Manuel Viciano Delibano
Edición: 1ª Edición: Noviembre 2014
ISBN: 9788401347351
Tapa: Flexible
Etiquetas: recuerdos, autoayuda, superación, diario, literatura estadounidense, reflexiones, escribir, autoanálisis, imaginación, creación literaria, crecimiento
Nº de páginas: 384


Argumento:

  Adam J. Kurtz, creativo y diseñador gráfico, propone a lector un ejercicio de creatividad en cada una de las páginas de este libro con la intención de potenciar su imaginación, desarrollar al máximo sus capacidades intelectuales y conocerse mejor. Todo ello desde la libertad imaginativa más absoluta, el sentido del humor y el punto de vista optimista sobre cuanto nos ocurre cada día.


Opinión:


   Un libro se lee. Eso ocurre en la mayoría de los casos. Pero a veces, hay libros que te sorprenden. Libros que te proponen que rompas sus páginas, que dobles sus esquinas, que taches, que cortes… y, sobre todo, que escribas en ellos. Es decir, que los uses, que los vivas. Este es uno de ellos: cada una de sus páginas propone una actividad creativa diferente (unas veces guiada por el autor pero, en ocasiones, completamente libre), lo que se traduce en realizarla en el propio libro. Lo cual puede hacer chirriar los dientes a quienes ni escriben, ni subrayan, ni doblan páginas; a quienes, al cerrar un libro, lo dejan exactamente igual que lo encontraron: inmaculado, impoluto.
   "Esto no es más que papel", dice Kurtz en una de las primeras páginas, animando a soltarse y utilizar, aprovechar, exprimir y disfrutar cada una de las siguientes propuestas. Pero también con otro sentido: esto solo es papel, son una serie de propuestas. El resto has de ponerlo tú. Tú, lector, tienes que dejarte guiar, o sorprender, o coger el guante que el autor que te lanza y entrar en su juego, sacándole todo el jugo a tus neuronas para disfrutar de las propuestas que realiza. De hecho, nada más empezar el libro, tú decides qué quieres que sea: ¿un diario? ¿Un recuerdo para el futuro? ¿Un calendario? ¿Un amigo? ¿Todas las anteriores? Y yo añadirían algunas más: un ejercicio de libertad, una ventana abierta por la que dejar volar a tu propia imaginación, un desafío para tu creatividad, un antídoto contra el pesimismo, una obra capaz de hacerte ver las pequeñas desgracias cotidianas desde otras perspectivas o un método para sacarle rendimiento a todas y cada una de las cosas que te pasen en la vida, sean buenas o malas.
   Con mucho humor, guiños a la telefonía móvil y las nuevas tecnologías y punto de vista optimista, Kurtz invita al lector a escribir en las páginas de esta obra sus mejores remedios contra el constipado, una lista de lugares emblemáticos que les gustaría visitar o describir su cita ideal. Todo vale con tal de conocerse mejor, serenar los nervios (en varios ocasiones utiliza el recurso de contar hasta diez… o hasta lo que haga falta), desconectar internet (aunque solo sea durante un rato), dejar volar la imaginación y convertir en materia utilizable (para la vida, para el trabajo, para uno mismo) cualquier situación que hayas vivido o cualquier sueño que quieras vivir.
   Ya desde la contraportada se invita al lector a soltar el móvil y coger el lápiz, aunque la verdad es que el juego con las redes sociales y los dispositivos que utilizamos para disfrutarlas (o sufrirlas, depende del momento) es continúo a lo largo de la obra. De hecho algunas páginas lanzan propuestas de escritura imitando con dibujos la caja de texto de Twitter o la actualización de estado de Facebook o un teléfono móvil. Y otras nos invitan a tuitear (con el hashtag #NOSOLODIARIO) el ejercicio creativo que toque en ese momento.
   En definitiva, Kurtz nos presenta una obra optimista y divertida, que será diferente para cada uno de sus lectores (convertidos aquí en coautores), hija de nuestra época, que invita a la sinceridad y a la libertad bien entendida con el objetivo de conseguir que nos salgamos de la cuadrícula en la que nos enseñaron a escribir de pequeños y descubramos que escribir es justo lo contrario: pura imaginación, pura creatividad, pura libertad, pura vida.
   Enlace a la reseña original.
   Nos seguimos leyendo.

2 comentarios:

  1. Ya ví este libro en su día y me parece una idea genial para quien guste de hacer estas cosas. Yo particularmente, solamente leo de noche, justo antes de dormir y para entonces estoy tan muerta que no voy a ponerme a hacer eso, pero original es, la verdad.
    Saludos.

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  2. Pues sí, original se ve. Pero tampoco me veo con este libro...
    Besotes!!!

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